¡Te damos la bienvenida a nuestra biblioteca! Aquí encontrarás publicaciones del BID sobre evaluación de tecnologías sanitarias (ETS), Planes de Beneficios en Salud (PBS), política farmacéutica, regulación de medicamentos y dispositivos médicos, fondos catastróficos y escaneo de horizonte, entre otros. Clasificamos nuestras publicaciones en tres categorías: Libros y monografías, documentos de política y notas técnicas.

Categorías

Margen de mejora: Desempeño de hospitales públicos en cuatro sistemas de salud de LAC
Breves
Los hospitales son un componente clave de los sistemas de salud y del gasto en salud en América Latina y el Caribe. Alrededor de la región, la atención hospitalaria ya representa cerca de 1/3 del gasto total en salud y se espera que aumente en términos absolutos y relativos con el aumento de las poblaciones y la mejora de la tecnología médica. El sector público tiene un papel sustancial en la provisión y el pago de los servicios hospitalarios, ya sea a través de la propiedad y la gestión de hospitales públicos o a través de esquemas públicos de seguros
Los costos ocultos de los medicamentos de alto costo: Caso Colombia
Breves
La velocidad con la que están emergiendo nuevas tecnologías de la salud no tiene precedentes. Algunas traen mejoras significativas a la salud para condiciones previamente intratables mientras que otras ofrecen beneficios clínicos modestos. Estas innovaciones ponen presión a los presupuestos en todas partes y, aunque sea políticamente difícil de aceptar, es un hecho que ningún país, por más rico que sea, puede financiar todas las terapias efectivas para todos.
¿En que gastan los países sus recursos en salud?: El caso de Colombia
Notas técnicas
El gasto en salud está en aumento en todo el mundo debido al incremento de enfermedades crónicas, avances tecnológicos médicos costosos y un envejecimiento de la población. En América Latina y el Caribe, en las últimas dos décadas, el gasto en salud ha aumentado del 6.6%al 7.9% del Producto Interno Bruto (PIB), y se prevé que aumente aún más en los próximos años. Sin embargo, estudios señalan que al menos el 20% del gasto en salud no contribuye de manera significativa a mejorar la salud de la población. Esto significa que los gobiernos podrían gastar menos y, al mismo tiempo, mejorar la salud de la población mediante estrategias para hacer que el gasto en salud sea más eficiente. Este informe analiza cómo se están utilizando los recursos en salud en Colombia y compara ese gasto con el de otros países. El objetivo es identificar posibles ineficiencias en el gasto que pueden corregirse. Los resultados revelan que Colombia gasta una cantidad similar o incluso más alta que otros países de la región en salud, pero aún hay margen para mejorar la eficiencia. A pesar de niveles de gasto comparables, otros países logran una mayor esperanza de vida. Una de las razones es el gasto innecesario en áreas de alta complejidad, como las visitas a las salas de urgencias, que son más frecuentes en Colombia en comparación con otros países. También se observa una proporción de gasto significativa en hospitalizaciones evitables y en condiciones que se pueden prevenir controlando sus factores de riesgo. Además, Colombia destina una fracción más alta que otros países a medicamentos,entre 4 y7 puntos porcentuales por encima de la media de países de la OCDE. Una parte considerable de este gasto corresponde a medicamentos de alto costo. El informe también señala que se pueden lograr eficiencias en la atención médica para las cinco condiciones que representan la mitad del gasto en salud. Esto incluye mejorar y desarrollar modelos costo efectivos para su atención, incluyendo atención primaria efectiva para prevenir y detectar complicaciones médicas a tiempo. En resumen, los resultados destacan la importancia de evaluar y monitorear de manera continua la eficiencia del gasto en salud. También se sugiere la necesidad de estrategias para reducir los precios de los medicamentos, mejorar los modelos de atención para enfermedades crónicas y fortalecer la atención primaria de salud para evitar el uso innecesario de servicios de mayor complejidad.
Cómo mejorar el impacto y la sostenibilidad de los proyectos en salud para la población
Breves
Según estimaciones realizadas por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se calcula que la red pública de salud de América Latina y el Caribe (ALC) presenta un déficit de inversiones superior a los USD $150.000 millones. Este déficit corresponde a las necesidades financieras no cubiertas para garantizar el adecuado funcionamiento de los activos de infraestructura y equipamiento médico.
Cuánto podrían ahorrar los hogares chilenos con la sustitución hacia medicamentos genéricos?
Breves
En América Latina y el Caribe, el gasto en medicamentos oscila entre 8,5% (Costa Rica) y 22,1% (México) del gasto total en salud[1]. Aunque los gobiernos afrontan parte de este gasto, en muchos de los países de la región los hogares asumen una proporción importante.
Gasto inteligente en salud: Cómo hacer que cada peso cuente
Libros y monografías
El envejecimiento de la población, el aumento en la prevalencia de enfermedades crónicas y la pandemia mundial del COVID-19 han intensificado la demanda por más atención médica. Sin embargo, el presupuesto para la salud es muy limitado y movilizar nuevos recursos es un desafío difícil. Ahora más que nunca, la región de América Latina y el Caribe necesita gastar de manera más inteligente en salud. Este informe presenta los principales conceptos, herramientas y estrategias para tomar decisiones más inteligentes sobre el gasto en salud, y guía a los lectores a recursos que proporcionan ejemplos prácticos y explicaciones detalladas.
¿Cuál es el costo de oportunidad de financiar medicamentos de alto costo?: el caso de Colombia
Notas técnicas
Estamos en una situación afortunada: tenemos a nuestra disposición más tecnologías beneficiosas de las que podemos financiar. Sin embargo, esta mayor disponibilidad junto con el envejecimiento de la población y los cambios epidemiológicosestá poniendo presión sobre el gasto en salud de todos los países del mundo. Para que se puedan materializar los beneficios del gasto es importante que este crecimiento sea sostenible, que no desplace a otras inversiones importantes y que esté alineado con las metas sanitarias delos sistemas de salud. Asignar recursos a una tecnología es necesariamente no destinarlos a otras. Como varios países de la región, Colombia enfrenta la presión financiera de cubrir medicamentos de alto costo. Algunos de estos representan importantes avances para la atención de algunas condiciones, mientras que otros tienen reducida efectividad clínica. Todos tienen un costo de oportunidad en términos de la salud que se deja de ganar por no asignar los recursos a otras prestaciones. Esta nota técnica cuantifica el costo de oportunidad de financiar medicamentos de alto costo en Colombia. Para hacerlo se analizaron diez medicamentos seleccionados por su alto impacto presupuestario o por su alto costo por caso. Se analizaron medicamentos oncológicos, para enfermedades autoinmunes y huérfanas, y un medicamento para diabetes de alto impacto presupuestario. Financiar estos medicamentos en vez de la mejor alternativa disponible en el país implica un costo adicional de US$543 millones durante el transcurso de los tratamientos de todas las personas que los reciben. Los Años de Vida Ajustados por Calidad (AVAC) que aportan estas tecnologías, en promedio por paciente durante todo el tratamiento, es de menos de un año de vida en perfecta salud (0,73 AVAC).Si estos recursos se destinaran a ampliar y mejorarlos servicios disponibles actualmente en el sistema de salud, la ganancia neta sería de88.000años de vida en perfecta salud. En otras palabras, si el sistema de salud desfinanciar a algunas prestaciones para financiar los diez medicamentos de alto costo seleccionados, los colombianos perderían 88.000años de vida en perfecta salud.
¿Cuál es el costo de oportunidad de financiar medicamentos de alto costo?: el caso de República Dominicana.
Notas técnicas

Estamos en la situación afortunada de tener a nuestra disposición opciones de tratamiento que no imaginábamos hace apenas unas décadas. De hecho, esta mayor disponibilidad, junto con el envejecimiento de la población y los cambios epidemiológicos, está presionando el gasto en salud en todos los países del mundo. Dado que los recursos son finitos, asignar recursos a una tecnología es necesariamente no destinarlos a otras. Como todos los países del mundo, República Dominicana enfrenta la presión financiera de cubrir medicamentos de alto costo. Algunos de estos representan importantes avances para la atención de ciertas condiciones, mientras que otros tienen una efectividad clínica reducida frente a las opciones ya existentes. Todos tienen un costo de oportunidad en términos de la salud que se deja de ganar por no asignar los recursos a otras prestaciones. Esta nota técnica ilustra cual puede ser este costo de oportunidad, calculándolo para una muestra de diez medicamentos de alto costo que cubre actualmente el sistema de salud dominicano. El costo de oportunidad se calculó con dos metodologías. Primero, se usó la metodología estándar para estos fines, donde se comparan los beneficios y los costos de los medicamentos de alto costo con un umbral de costo-efectividad. La segunda estimó el costo de oportunidad en términos de las ganancias en salud que traería reasignar estos recursos a cerrar brechas en servicios esenciales. Financiar estos medicamentos en vez de la mejor alternativa terapéutica disponible en el país implica un costo adicional de US$154 millones durante todo el transcurso del tratamiento en todas las personas que los reciben. El número total de años de vida ajustados por calidad (AVAC) que aportan estas tecnologías, en promedio por paciente y durante todo el tratamiento, es de menos de un año de vida en perfecta salud (0,83 AVAC). Usando el método del umbral, se concluye que si estos recursos se destinaran a ampliar los servicios disponibles en el sistema de salud, la ganancia neta sería de 35.000 años de vida en perfecta salud. Si los recursos se destinaran a cubrir las brechas de cobertura en detección y tamizaje de cáncer de cuello uterino (de 54%) y en detección y manejo no farmacológico del paciente diabético (de 61%) se podría cerrar toda la brecha en la detección del cáncer uterino y 46% de la brecha en diabetes, con una ganancia neta en salud de 136.000 años de vida en perfecta salud.

¿Cuántos años de vida saludable pueden ganar los países de América Latina y El Caribe con una mejor asignación del gasto farmacéutico?: estudios de caso de Chile, Colombia y República Dominicana.
Resumen de políticas

El gasto en salud está aumentando globalmente debido a cambios en la epidemiología y demografía, así como al surgimiento de tecnologías médicas más costosas y una mayor demanda de servicios de salud. En América Latina y el Caribe, el gasto en salud ha aumentado del 6,6 al 7,9 por ciento del PIB en las últimas dos décadas, y se espera que aumente aún más hacia 2030. Sin embargo, financiar este gasto exclusivamente a través de mayores asignaciones presupuestarias es poco viable, especialmente debido a las restricciones fiscales resultantes de la pandemia y la incertidumbre económica.

Metodología para la estimación del umbral de costo-efectividad: el caso de República Dominicana
Notas técnicas

Este trabajo utiliza técnicas cuantitativas de la economía de la salud para ofrecer herramientas que permitan evaluar la costo-efectividad de la financiación de nuevas tecnologías (incluyendo procedimientos y medicamentos) que resulten en un mayor bienestar y salud del país. Específicamente, se desarrolla una metodología para la estimación del umbral de costo efectividad (UCE) del sistema de salud pública de Republica Dominicana. Dado que el UCE mide el nivel de gasto en el sistema de salud que se estima necesario para ganar un año de vida ajustado por calidad de vida (AVAC) o alguna medida análoga de resultado en salud, este valor ofrece un criterio para determinar si la financiación de una nueva tecnología es costo-efectivo. Dada una restricción presupuestal, si el valor por AVAC de una nueva tecnología es superior al UCE, su adopción proporcionaría beneficios de salud inferiores a las tecnologías que se desplazarían. Usando técnicas econométricas este estudio estima el UCE para la República Dominicana en $85,928 pesos dominicanos (DOP), con intervalos de confianza de $40,720 y $131,140 DOP lo cual equivale a al 26% del PIB per cápita en el año 2016 ($331,253 pesos dominicanos) con un intervalo de confianza de 12,3% y 39,6% del PIB per cápita respectivamente. Estos resultados son robustos a muchas especificaciones econométricas y/o medidas alternativas de resultados en salud.

Margen de mejora: Desempeño de hospitales públicos en cuatro sistemas de salud de LAC
Breves
Los hospitales son un componente clave de los sistemas de salud y del gasto en salud en América Latina y el Caribe. Alrededor de la región, la atención hospitalaria ya representa cerca de 1/3 del gasto total en salud y se espera que aumente en términos absolutos y relativos con el aumento de las poblaciones y la mejora de la tecnología médica. El sector público tiene un papel sustancial en la provisión y el pago de los servicios hospitalarios, ya sea a través de la propiedad y la gestión de hospitales públicos o a través de esquemas públicos de seguros
Los costos ocultos de los medicamentos de alto costo: Caso Colombia
Breves
La velocidad con la que están emergiendo nuevas tecnologías de la salud no tiene precedentes. Algunas traen mejoras significativas a la salud para condiciones previamente intratables mientras que otras ofrecen beneficios clínicos modestos. Estas innovaciones ponen presión a los presupuestos en todas partes y, aunque sea políticamente difícil de aceptar, es un hecho que ningún país, por más rico que sea, puede financiar todas las terapias efectivas para todos.
¿En que gastan los países sus recursos en salud?: El caso de Colombia
Notas técnicas
El gasto en salud está en aumento en todo el mundo debido al incremento de enfermedades crónicas, avances tecnológicos médicos costosos y un envejecimiento de la población. En América Latina y el Caribe, en las últimas dos décadas, el gasto en salud ha aumentado del 6.6%al 7.9% del Producto Interno Bruto (PIB), y se prevé que aumente aún más en los próximos años. Sin embargo, estudios señalan que al menos el 20% del gasto en salud no contribuye de manera significativa a mejorar la salud de la población. Esto significa que los gobiernos podrían gastar menos y, al mismo tiempo, mejorar la salud de la población mediante estrategias para hacer que el gasto en salud sea más eficiente. Este informe analiza cómo se están utilizando los recursos en salud en Colombia y compara ese gasto con el de otros países. El objetivo es identificar posibles ineficiencias en el gasto que pueden corregirse. Los resultados revelan que Colombia gasta una cantidad similar o incluso más alta que otros países de la región en salud, pero aún hay margen para mejorar la eficiencia. A pesar de niveles de gasto comparables, otros países logran una mayor esperanza de vida. Una de las razones es el gasto innecesario en áreas de alta complejidad, como las visitas a las salas de urgencias, que son más frecuentes en Colombia en comparación con otros países. También se observa una proporción de gasto significativa en hospitalizaciones evitables y en condiciones que se pueden prevenir controlando sus factores de riesgo. Además, Colombia destina una fracción más alta que otros países a medicamentos,entre 4 y7 puntos porcentuales por encima de la media de países de la OCDE. Una parte considerable de este gasto corresponde a medicamentos de alto costo. El informe también señala que se pueden lograr eficiencias en la atención médica para las cinco condiciones que representan la mitad del gasto en salud. Esto incluye mejorar y desarrollar modelos costo efectivos para su atención, incluyendo atención primaria efectiva para prevenir y detectar complicaciones médicas a tiempo. En resumen, los resultados destacan la importancia de evaluar y monitorear de manera continua la eficiencia del gasto en salud. También se sugiere la necesidad de estrategias para reducir los precios de los medicamentos, mejorar los modelos de atención para enfermedades crónicas y fortalecer la atención primaria de salud para evitar el uso innecesario de servicios de mayor complejidad.
Cómo mejorar el impacto y la sostenibilidad de los proyectos en salud para la población
Breves
Según estimaciones realizadas por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se calcula que la red pública de salud de América Latina y el Caribe (ALC) presenta un déficit de inversiones superior a los USD $150.000 millones. Este déficit corresponde a las necesidades financieras no cubiertas para garantizar el adecuado funcionamiento de los activos de infraestructura y equipamiento médico.
Cuánto podrían ahorrar los hogares chilenos con la sustitución hacia medicamentos genéricos?
Breves
En América Latina y el Caribe, el gasto en medicamentos oscila entre 8,5% (Costa Rica) y 22,1% (México) del gasto total en salud[1]. Aunque los gobiernos afrontan parte de este gasto, en muchos de los países de la región los hogares asumen una proporción importante.
Gasto inteligente en salud: Cómo hacer que cada peso cuente
Libros y monografías
El envejecimiento de la población, el aumento en la prevalencia de enfermedades crónicas y la pandemia mundial del COVID-19 han intensificado la demanda por más atención médica. Sin embargo, el presupuesto para la salud es muy limitado y movilizar nuevos recursos es un desafío difícil. Ahora más que nunca, la región de América Latina y el Caribe necesita gastar de manera más inteligente en salud. Este informe presenta los principales conceptos, herramientas y estrategias para tomar decisiones más inteligentes sobre el gasto en salud, y guía a los lectores a recursos que proporcionan ejemplos prácticos y explicaciones detalladas.
¿Cuál es el costo de oportunidad de financiar medicamentos de alto costo?: el caso de Colombia
Notas técnicas
Estamos en una situación afortunada: tenemos a nuestra disposición más tecnologías beneficiosas de las que podemos financiar. Sin embargo, esta mayor disponibilidad junto con el envejecimiento de la población y los cambios epidemiológicosestá poniendo presión sobre el gasto en salud de todos los países del mundo. Para que se puedan materializar los beneficios del gasto es importante que este crecimiento sea sostenible, que no desplace a otras inversiones importantes y que esté alineado con las metas sanitarias delos sistemas de salud. Asignar recursos a una tecnología es necesariamente no destinarlos a otras. Como varios países de la región, Colombia enfrenta la presión financiera de cubrir medicamentos de alto costo. Algunos de estos representan importantes avances para la atención de algunas condiciones, mientras que otros tienen reducida efectividad clínica. Todos tienen un costo de oportunidad en términos de la salud que se deja de ganar por no asignar los recursos a otras prestaciones. Esta nota técnica cuantifica el costo de oportunidad de financiar medicamentos de alto costo en Colombia. Para hacerlo se analizaron diez medicamentos seleccionados por su alto impacto presupuestario o por su alto costo por caso. Se analizaron medicamentos oncológicos, para enfermedades autoinmunes y huérfanas, y un medicamento para diabetes de alto impacto presupuestario. Financiar estos medicamentos en vez de la mejor alternativa disponible en el país implica un costo adicional de US$543 millones durante el transcurso de los tratamientos de todas las personas que los reciben. Los Años de Vida Ajustados por Calidad (AVAC) que aportan estas tecnologías, en promedio por paciente durante todo el tratamiento, es de menos de un año de vida en perfecta salud (0,73 AVAC).Si estos recursos se destinaran a ampliar y mejorarlos servicios disponibles actualmente en el sistema de salud, la ganancia neta sería de88.000años de vida en perfecta salud. En otras palabras, si el sistema de salud desfinanciar a algunas prestaciones para financiar los diez medicamentos de alto costo seleccionados, los colombianos perderían 88.000años de vida en perfecta salud.
¿Cuál es el costo de oportunidad de financiar medicamentos de alto costo?: el caso de República Dominicana.
Notas técnicas

Estamos en la situación afortunada de tener a nuestra disposición opciones de tratamiento que no imaginábamos hace apenas unas décadas. De hecho, esta mayor disponibilidad, junto con el envejecimiento de la población y los cambios epidemiológicos, está presionando el gasto en salud en todos los países del mundo. Dado que los recursos son finitos, asignar recursos a una tecnología es necesariamente no destinarlos a otras. Como todos los países del mundo, República Dominicana enfrenta la presión financiera de cubrir medicamentos de alto costo. Algunos de estos representan importantes avances para la atención de ciertas condiciones, mientras que otros tienen una efectividad clínica reducida frente a las opciones ya existentes. Todos tienen un costo de oportunidad en términos de la salud que se deja de ganar por no asignar los recursos a otras prestaciones. Esta nota técnica ilustra cual puede ser este costo de oportunidad, calculándolo para una muestra de diez medicamentos de alto costo que cubre actualmente el sistema de salud dominicano. El costo de oportunidad se calculó con dos metodologías. Primero, se usó la metodología estándar para estos fines, donde se comparan los beneficios y los costos de los medicamentos de alto costo con un umbral de costo-efectividad. La segunda estimó el costo de oportunidad en términos de las ganancias en salud que traería reasignar estos recursos a cerrar brechas en servicios esenciales. Financiar estos medicamentos en vez de la mejor alternativa terapéutica disponible en el país implica un costo adicional de US$154 millones durante todo el transcurso del tratamiento en todas las personas que los reciben. El número total de años de vida ajustados por calidad (AVAC) que aportan estas tecnologías, en promedio por paciente y durante todo el tratamiento, es de menos de un año de vida en perfecta salud (0,83 AVAC). Usando el método del umbral, se concluye que si estos recursos se destinaran a ampliar los servicios disponibles en el sistema de salud, la ganancia neta sería de 35.000 años de vida en perfecta salud. Si los recursos se destinaran a cubrir las brechas de cobertura en detección y tamizaje de cáncer de cuello uterino (de 54%) y en detección y manejo no farmacológico del paciente diabético (de 61%) se podría cerrar toda la brecha en la detección del cáncer uterino y 46% de la brecha en diabetes, con una ganancia neta en salud de 136.000 años de vida en perfecta salud.

¿Cuántos años de vida saludable pueden ganar los países de América Latina y El Caribe con una mejor asignación del gasto farmacéutico?: estudios de caso de Chile, Colombia y República Dominicana.
Resumen de políticas

El gasto en salud está aumentando globalmente debido a cambios en la epidemiología y demografía, así como al surgimiento de tecnologías médicas más costosas y una mayor demanda de servicios de salud. En América Latina y el Caribe, el gasto en salud ha aumentado del 6,6 al 7,9 por ciento del PIB en las últimas dos décadas, y se espera que aumente aún más hacia 2030. Sin embargo, financiar este gasto exclusivamente a través de mayores asignaciones presupuestarias es poco viable, especialmente debido a las restricciones fiscales resultantes de la pandemia y la incertidumbre económica.

Metodología para la estimación del umbral de costo-efectividad: el caso de República Dominicana
Notas técnicas

Este trabajo utiliza técnicas cuantitativas de la economía de la salud para ofrecer herramientas que permitan evaluar la costo-efectividad de la financiación de nuevas tecnologías (incluyendo procedimientos y medicamentos) que resulten en un mayor bienestar y salud del país. Específicamente, se desarrolla una metodología para la estimación del umbral de costo efectividad (UCE) del sistema de salud pública de Republica Dominicana. Dado que el UCE mide el nivel de gasto en el sistema de salud que se estima necesario para ganar un año de vida ajustado por calidad de vida (AVAC) o alguna medida análoga de resultado en salud, este valor ofrece un criterio para determinar si la financiación de una nueva tecnología es costo-efectivo. Dada una restricción presupuestal, si el valor por AVAC de una nueva tecnología es superior al UCE, su adopción proporcionaría beneficios de salud inferiores a las tecnologías que se desplazarían. Usando técnicas econométricas este estudio estima el UCE para la República Dominicana en $85,928 pesos dominicanos (DOP), con intervalos de confianza de $40,720 y $131,140 DOP lo cual equivale a al 26% del PIB per cápita en el año 2016 ($331,253 pesos dominicanos) con un intervalo de confianza de 12,3% y 39,6% del PIB per cápita respectivamente. Estos resultados son robustos a muchas especificaciones econométricas y/o medidas alternativas de resultados en salud.